viernes, 19 de julio de 2013

ALGUNAS CUESTIONES SOBRE LA RECONSTRUCCIÓN MAMARIA

Dr. José María del Val Gil
Jefe de Servicio de Cirugía General del Hospital Obispo Polanco de Teruel
 
Cuando a una paciente se le realiza una mastectomía (extirpación de la mama), existe la posibilidad de practicarle una reconstrucción de la mama extirpada, con el objetivo de mejorar su calidad de vida, aumentando su autoestima y sin interferir en su tratamiento.
De todas formas, hay pacientes en estas circunstancias, en las que no es aconsejable la reconstrucción mamaria, por lo que cada caso debe de estudiarse individualmente entre la paciente y el cirujano.
Existen varias cuestiones que se deben tener en cuenta ante una reconstrucción mamaria, y que podemos resumir en las siguientes preguntas:
 
      1.-¿Cuál es el mejor momento para realizar la reconstrucción?
      2.-¿Cómo podemos reconstruir el volumen mamaria?
     3.-¿Se debe hacer algo en la otra mama no operada?
     4.-El complejo areola-pezón ¿se puede reconstruir?
     5.-¿Qué riesgos conlleva una reconstrucción?
     6.-¿Se debe cambiar la prótesis mamaria al cabo de los años?

 
            A todas estas preguntas, vamos a intentar contestar:
1.-¿Cuál es el mejor momento para realizar la reconstrucción?
Existen dos momentos en los que se puede realizar la reconstrucción mamaria, bien en el momento de la extirpación de la mama (se llama reconstrucción inmediata) o bien al cabo de un tiempo de la extirpación de la mama (reconstrucción diferida).
 
Desde el punto de vista oncológico, habiendo estudiado previamente cada caso en particular, no hay ninguna diferencia. En cuanto a la paciente, hay autores que aconsejan la reconstrucción inmediata, sobre todo por el beneficio psicológico de la paciente; sin embargo, otros prefieren la reconstrucción diferida, una vez haya finalizado la paciente todas las medidas terapéuticas adyuvantes.
Pienso que ese momento debe decidirlo la paciente, con la ayuda de su cirujano.

 
2.-¿Cómo podemos reconstruir el volumen mamario?
Para reconstruir el volumen mamario disponemos de varias opciones y que resumimos en las siguientes:
            -Expansores o prótesis-expansoras
            -Colgajos miocutáneos con o sin prótesis añadidas
-Expansores o prótesis-expansoras:
Los expansores tisulares son dispositivos de forma preferentemente anatómica, válvula de infiltración incorporada y textura rugosa, que se colocan detrás del músculo pectoral para provocar una distensión progresiva de la piel, inyectando, a través de la válvula que incorporan, suero fisiológico, hasta conseguir el volumen deseado. Posteriormente hay que retirar ese expansor y colocar una prótesis mamaria definitiva.
 
Una variante de los expansores son las prótesis expansores, que se basan en lo mismo que los expansores, pero que si se consigue un volumen y forma adecuados, se pueden dejar como prótesis definitivas tras retirar la válvula que llevan.
 

 

 
-Colgajos miocutáneos con o sin prótesis añadidas:
Otra opción en la reconstrucción mamaria es el uso de colgajos miocutáneos, los cuales se pueden obtener del abdomen o de la espalda.
Los colgajos del abdomen, también conocidos como TRAM, utilizan el músculo recto anterior del abdomen, permitiendo construir un volumen mamario adecuado sin precisar, la mayoría de veces, de una prótesis. Este tipo de reconstrucción requiere la reparación de la pared abdominal con una malla.

 
Dentro de los colgajos del abdomen, podemos incluir el conocido como DIEP, es un colgajo libre que se basa en los vasos perforantes transmusculares de la epigástrica inferior profunda. Es una técnica más compleja, que necesita de más tiempo quirúrgico y con el riesgo de más complicaciones.
 

Dentro de los colgajos miocutáneos, la técnica más utilizada hoy en día es el colgajo del dorsal ancho de la espalda, que aporta menos volumen que en el caso del TRAM y requiere colocar una prótesis.


Existen otras modalidades de colgajos miocutáneos, menos empleadas y que pienso no es el momento ni lugar para comentarlas.


3.-¿Se debe hacer algo en la otra mama no operada?

Una vez reconstruida la mama, surge el problema de la asimetría con la mama contralateral no operada, ya que vamos a tener una mama ptósica (caída) normal por la edad y la reconstruida, que no se encuentra caída. Por ello, la mayoría de las veces hay que buscar la mayor simetría entre ambas mamas, para lo cual hay que actuar sobre la mama no operada de cara a elevar la misma, o reducir volumen, etc, buscando esa simetría.


4.-El complejo areola-pezón ¿se puede reconstruir?

Una vez tenemos la reconstrucción de la mama y la simetrización de ambas mamas, nos queda la reconstrucción del complejo areola-pezón. Para ello podemos recurrir bien simplemente a un tatuaje de la areola o bien a una reconstrucción de areola-pezón con injertos libres de piel o con colgajos de piel de la mama reconstruida o con trasplante de parte del pezón del lado contralateral.



5.-¿Qué riesgos conlleva una reconstrucción?

Como todo el mundo conoce, cualquier cirugía conlleva un riesgo. En el caso concreto de la reconstrucción mamaria no es un riesgo elevado, pero existe. Además de los riesgos propios de la anestesia, existen los riesgos propios de la cirugía, que en el caso de colocar una prótesis o expansor, pueden aparecer complicaciones tipo dolor en las expansiones, seromas, infecciones de la prótesis, intolerancias, etc, pero no es lo frecuente. En el caso de hacer un colgajo miocutáneo existe la posibilidad de necrosis del colgajo, seromas de la zona donante, etc.

6.-¿Se debe cambiar la prótesis mamaria al cabo de los años?

Habitualmente las casas comerciales de la prótesis aconsejan el cambio de las prótesis mamarias a los diez años de su colocación. Sin embargo, en mi opinión, hay casos en los que no es necesario cambiarlas en más tiempo y, otros casos, en los que hay cambiarlas antes. El seguimiento de las pacientes con prótesis es lo que nos va a marcar la actitud a seguir.